Reflexiones

Marzo 3
Romanos 3:21-24
21 La Biblia misma nos enseña claramente que ahora Dios nos acepta sin necesidad de cumplir la ley. 22 Dios acepta a todos los que creen y confían en Jesucristo, sin importar si son judíos o no lo son. 23 Todos hemos pecado, y por eso estamos lejos de Dios. 24 Pero él nos ama mucho, y nos declara inocentes sin pedirnos nada a cambio. Por medio de Jesús, nos ha librado del castigo que merecían nuestros pecados.

Otro extraordinario pasaje, ahora sobre el elemento justicia. ¿Sabe que entender este elemento del Reino es básico para poder disfrutar del mismo?
Pablo dice que todos somos malos, que aunque los judíos recibieron primero el llamado, si no obedecen la ley no importa si están circuncidados o no.
Ahora para Dios, todos aquellos que obedecen la ley, aunque no estén circuncidados son judíos, porque no se trata del lugar do de naciste sino de llamado.
Dios nos encerró a todos en desobediencia para poder justificarnos, y mirarnos a través de lo que El mismo sembró, Su Hijo, por medio de El nos juzga y nos acepta de nuevo en su seno de Padre.
Como hemos caminado sin pensar que ya somos aceptos y perdonados, como vivimos creyendo que El está enojado, cuando El mismo se llenó los requisitos por amor a nosotros.
Por eso vivimos con cosas que no vienen de El y nos castigamos porque creemos que debemos de merecer ese amor, pero ese amor, es por creación, es porque somos suyos, no se trata de merecer, se trata de la manera en como El nos ama.