domingo, 15 de abril de 2012

Reflexiones

ABRIL15
Génesis 15:1-5
1 Después de esto, Dios se le apareció a Abram en una visión, y le dijo:
-- Abram, no tengas miedo. Yo soy quien te protege. Voy a darte muchas riquezas.
2- 4 Abram le contestó:
-- ¡Dios y Rey mío! ¿Y para qué me vas a dar riquezas si no tengo hijos? Cuando me muera, ese extranjero que tengo por esclavo va a quedarse con todo lo que es mío.
Pero Dios le aseguró:
-- Tu heredero será un hijo tuyo, y no tu esclavo Eliézer.
5 Luego lo llevó afuera y le dijo:
-- Mira el cielo y sus muchas estrellas. ¿Verdad que no puedes contarlas? ¡Pues tampoco será posible contar a tus descendientes!


La gran promesa que hizo que Abraham entrara al salón de la fama de la fe, le creyó a Dios algo que era simplemente imposible.
Tener un hijo, tener descendencia, lograr dejar huella y legado.
Dios hace pacto con el, y Abraham se dedica a defender el pacto fresco y vivo. Yo creo que esta figura el pacto es la forma en que nosotros tenemos que defender lo que Dios nos ha dado, hasta que no nos queden fuerzas, para que entonces entre El mismo a defender la promesa que nos ha hecho de ser y de tener herederos.
Dios le abre le plan, le dice los límites de la tierra que le va a dar, le abre la historia de su descendencia y le asegura: tu morirás tranquilo.
Yo moriré tranquila, tú también si hacemos nuestra parte del pacto, si cumplimos con lo que nos corresponde: CREER

No hay comentarios:

Publicar un comentario